Rafael Aucapiña Jimba, casi cuarenta años dedicado al arte de la carpintería

Rafael Aucapiña Jimba de 59 años, es cuencano, pero vive en Quito más de cuarenta, dedicado al trabajo de la carpintería.

Llegó a la capital en los años 80, como muchos provincianos con la ilusión de salir adelante.

Casi de inmediato, cuenta, fue invitado por un maestro carpintero de su natal Cuenca a trabajar en esta laboriosa actividad que, ha realizado más de la mitad de su vida

Rafa, como le llaman sus clientes y amigos con quienes comparte momentos de asueto, ha vivido de éste oficio, y espera hacerlo, por muchos años más.

El hombre perdió a su esposa en el 2012, quedándose solo, pero sin dejar de lado su misión de padre. Sus dos hijos, ahora adultos, lo visitan siempre.

Es el cuarto de siete hermanos de un humilde hogar, pero muy trabajador, razón por la que debió salir a laborar desde temprana edad, para ayudar a la familia.

Su padre de profesión constructor, recuerda, le enseñó a ganarse el pan de cada día con el sudor de su frente, De ahí, que todos sus hermanos lograron aprender un oficio, para superarse.

Tras la muerte de su esposa, a quien recuerda con mucha nostalgia, debió acostumbrarse y adaptarse a la soledad

Este cuencano que nació en el barrio San José de El Carmen, espera tener una vejez tranquila y pide a Dios salud, para seguir en su constante lucha.

Contacto Rafa 0980606199

Foto y texto, Gilmer Rivas