El analista económico, Alberto Acosta Burneo propuso la creación de un fideicomiso, cuyos recursos económicos que se recauden sean destinados estrictamente para combatir la inseguridad en el país.
Acosta estimó que el gasto público el año pasado tuvo un exceso del gasto de 5 mil 700 millones de dólares, frente a los ingresos que tiene el fisco.
Los atrasos alcanzaron los 3 mil 600 millones de dólares, precisó.
Así alertó que si ese dinero que se busca recaudar van a la cuenta única del tesoro, servirá para financiar esa gran fiesta fiscal y no habrá recursos económicos para combatir la inseguridad.
La segunda posibilidad, dijo es subir el Impuesto al Valor Agregado, IVA, pero aclaró que este es un impuesto regresivo, es decir que pesa más a los que menos tienen.
En este sentido aclaró, que hay alternativas mucho más eficientes que tienen menor costo y propone que se cree un fideicomiso para que este dinero no se diluya en la cuenta única del tesoro que es una cuenta mágica, donde dólar que entra, desaparece.
En cambio si se crea un fideicomiso, el dinero tendrá un rumbo específico, en este caso a seguridad.
Así reiteró que el fisco tendrá la obligación de tener toda la transparencia disponible para que los ciudadanos «seamos veedores del uso de ese dinero».
En segundo lugar, los recursos se pueden obtener de la focalización del subsidio de los combustibles. «Esta es una alternativa mucho más adecuada económicamente», agregó.
Esto, según Acosta, porque hoy los subsidios benefician mayormente a quienes más tienen.
En este sentido, insistió que hay que focalizar esos subsidios, manteniendo ese beneficio para los más vulnerables, como por ejemplo, establecer fijas las tarifas del transporte público, pero permitir la flotación de los precios de combustibles para el resto de ciudadanos.
«Eso se puede hacer, haciendo una transferencia a los transportistas cada mes, para que no tengan que cambiar la tarifa, aunque el costo de los combustibles cambie en los surtidores.
En tercer lugar, aclaró que «tenemos que enfocarnos en una corresponsabilidad, es decir, que el Estado asuma su responsabilidad, entendiendo que la crisis que vive el país es causa de los políticos gastadores. «No se trata que solo el pueblo pague la cuenta».
Acosta propone que por cada dólar que un ecuatoriano aporte al fideicomiso para financiar la inseguridad el fisco entregue un dólar en reducción de gastos inútiles e innecesarios que, según dijo existen muchos en el de Estado.
«Entonces no solo seremos los ciudadanos los que asumamos todo el costo del combate a la inseguridad, sino que será un esfuerzo compartido», subrayó.