QUITO,ECUADOR.- El gobierno ecuatoriano enfrenta la mayor polémica durante sus corto período gubernamental, tras el anuncio del presidente Daniel Noboa de concesionar la operación de campo petrolero Sacha al consorcio chino conformado por las empresas Amodaimi Oil Company S.L. y Petrolia Ecuador S.A.
Noboa que busca la reelección presidencial en segunda vuelta electoral prevista para el 13 de abril próximo enfrenta una dura oposición en esta iniciativa de gremios sindicales y sectores políticos que consideran un «carnavalazo» del gobierno de Noboa.
El ex candidato presidencial del movimiento Pachakutik, Leonidas Iza anunció total resistencia a esta iniciativa que a su criterio constituye la «privatización» del sector petrolero en perjuicio del erario nacional.
Esto por que se trata del campo petrolero más productivo del país, que estaba siendo operado por la estatal petrolera Petroecuador.
De su lado la ministra de Energía y Minas, Inés Manzano, defiende el proceso para delegar la operación del campo petrolero Sacha, destacando dos aspectos: No es una privatización y el país necesita los $ 1.500 millones que el Estado recibirá de entrada por la adjudicación.
“La salud y los damnificados no pueden esperar” y ese monto será para inversión social: “Con esos $ 1.500 millones no tengo que pagar al Fondo Monetario Internacional (FMI) ni deuda externa”, indica la ministra, al tiempo de aclarar que la “adjudicación no implica firma del contrato, hay un plazo de 30 días, una serie de condiciones que deben presentar”. Dijo que el pago de la prima es antes de la firma del contrato, “si no hay pago no hay contrato”.