María Isabel Chicaiza lleva 14 años quitando el malestar y estrés de sus clientes y espera, con la bendición de Dios, seguir haciéndolo por mucho tiempo más.
Con el ánimo de conocer sus técnicas en masajes y los testimonios fehacientes de sus clientes acudimos hasta su Centro Terapéutico ubicado en el Sur de Quito, en el Barrio La Venecia, Parroquia de Guamaní.
Son muchas personas las que llegan para pedir la terapia a Isabel quien atiende con alegría trasmitiendo esa energía de Fe y esperanza de un rápido alivio.
Cuando llegamos hasta su consultorio evidenciamos cómo Isabel, con sus «manitas sanadoras», como ella les llama, trabajaba, recibiéndonos con toda la energía positiva que le caracteriza.
Sus masajes manuales, según dice son los de mayor beneficio, pues desestreza totalmente al paciente, aunque antes las personas pasan por una cama caliente.
Estos masajes provocan una mejor circulación de la sangre, una de las razones para que se le vaya quitando el estrés por múltiples problemas que atraviesa el paciente, incluso por alguna dolencia mayor (sangre espesa, dolencia de columna, etc).
Isabel dice que son muchos los pacientes que después de sus terapias salen aliviados, recuperando fuerzas y entusiasmo para seguir adelante.
Don Segundo Gonzalo Sánchez oriundo de Santo Domingo de Los Tsáchilas testificó que se siente muy aliviado, después de un mes de terapias.
Cuenta que, con los masajes ha sentido una gran mejoría; incluso ha recuperado el ánimo para volver a trabajar. “Me siento muy recuperado”, insiste.
Por ello recomendó, a otras personas acudan a donde la señora Isabel a recibir estos masajes que son realmente curativos.
Otro de sus pacientes, don Luis Ortega, que sufría de insomnio, luego de las terapias, dice, duerme como un bebé.
Luis no dudó en recomendar los masajes de la señora Isabel para recuperar fuerzas y ánimo para seguir adelante.
contacto 0993057421
